
En esta nueva entrega de la ronda, nuestro colega chileno Catador, es la persona que ha invitado a esta versión. Él ha propuesto un tema bastante divertido, picante, pero a la vez, muy interesante para todos los lectores de los blogs participantes
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La cosa va así: de alguna manera conociste a una señorita y ésta, luego de saber tu afición por las cervezas, te pide la invites a una cata personal, proponiendo tú, ni tonto ni perezoso, tu humilde morada.
¿Qué cervezas le darías a probar, y para qué fines?
Una mujer a la que apenas conozco muestra interés para que yo le enseñe una cata cervecera. Acá en Colombia, las mujeres gustan mucho de las cervezas Corona, Peroni y Redd's, de manera que antes de la cata es probable que estemos bebiendo una de esas dos bebidas en algún pub o tienda de barrio. Una vez ella me haga la hipotética insinuación que le realice una cata de cervezas, antes que nada, le comentaría que en dicha cata habrá cervezas que van a estremecer su paladar y deleitarse con sus aromas (vamos, hay que llegarle a las emociones).
Camino a casa, se me ocurren algunas marcas que he probado y que se venden en Colombia, se me vienen a la mente todas las lagers que he probado, pero en realidad, sus sabores, cuerpo y textura son similares a las que bebimos en el momento de conocernos, así que las descarto inmediatamente. ¿Qué tal una Amsterdam Maximator? ¡¡Carajo!! Si me la quiero sacar de encima, esa cerveza es la indicada, pero si en realidad es alguien que me despierta interés, ¿para qué la voy a insultar con eso?
¡¡Dios!! El camino se acorta y todavía no se me ocurre una cerveza que cuando la esté bebiendo, en donde sea, siempre le traiga a su cabeza mi recuerdo... ¡¡PLING!! De repente se me enciende el bombillo y recuerdo algunas deliciosas ales que he probado. ¡¡Jejejeje!! El factor sorpresa está listo.
Llegamos a casa, la invito a sentar y para la apertura, le tengo una suave cerveza
Chapinero Porter de Bogota Beer Company, con su amargor moderado, su sutil aroma a café, su exquisito sabor tostado y su regusto breve, una excelente opción para comenzar una excelente charla y abrir el apetito. "Jorge, dijiste que me ibas a catar cinco cervezas", bien, para seguir aumentado su expectativa, traigo unas porciones de delicioso queso gouda ¿cerveza y queso gouda?, SI, y créanme, el maridaje es simplemente impecable. Esta vez, invito a la cata a una cerveza de trigo, la famosa
Erdinger Weissbier, sus aromas herbales, sus sabores moderadamente ácidos y frutales, su cuerpo y caracter, delicioso, y con el quesito, ni se diga.
Bueno, ahora lo que deseo es relacionar su ser femenino con una cerveza deliciosa, compleja, en esta oportunidad traigo a colación una deliciosa cerveza
Tilburg's, seguramente la asombrarán sus aromas dulces, a suave caramelo, su sensual color café, el dulzor de la malta, con toques de chocolate, sencillamente delicioso.
Continuando con las mejores impresiones, y seguir sumergiéndola en el placer de las buenas cervezas, le ofrezco una exótica cerveza canadiense
Blanche de Chambly (para lograr un mayor impacto, se lo pronuncio en francés de París), con sus provocativos aromas y sabores frutales, su amargor balanceado y su enigmático color dorado turbio, eso le llegará a lo más profundo de sus emociones y sentimientos.
Y para finalizar con todos los honores esta cata, quedar como un príncipe, que me recuerde y se le despierten las mejores emociones cada vez que vea las cervezas que le di a probar, le ofrezco mi cerveza favorita, una fascinante
Trappe Dubbel, acompañada de un apetitoso pernil ahumado de cerdo, su aroma y sabor a uvas, nueces y manzanas, su sensual color ámbar opaco, su cuerpo..... ¡¡Ahhhh!! Lo que suceda después del último sorbo queda en manos de la lujuria e imaginación.
Dirán algunos lectores, "¡¡Oiga, pero Jorge la emborrachó, se le va a dormir a la primera cerveza!!" bueno, para la cata, cuento con pequeños vasos de 50 mL en las que sirvo cada muestra de cerveza, y 250 mL en total no emborrachan a nadie, pero si le abren mucho la personalidad.